Miguel Ángel Rebolledo, investigador del Instituto de Investigación en Ingeniería de Aragón (I3A) de la Universidad de Zaragoza, ha sido nombrado socio de honor de la Sociedad Española de Óptica. Esta sociedad científica quiere reconocer con esta distinción la aportación al desarrollo de la óptica española que ha realizado a lo largo de su carrera profesional.
Miguel Ángel Rebolledo dirige el laboratorio de Fibras y Guías Ópticas Activas dentro del grupo de investigación de Tecnologías Óptica Láser (TOL) de la Universidad de Zaragoza, un grupo con más de 20 años de trayectoriaen diversos temas de tecnología óptica en los que el láser es un elemento fundamental.
La actividad investigadora del laboratorio se centra en el estudio y desarrollo de amplificadores y láseres hechos con fibra óptica o con micro-estructuras de óptica integrada. Estos dispositivos fotónicos tienen abundantes aplicaciones en el mundo de las comunicaciones ópticas (incluyendo la transmisión de información encriptada) y en el procesado de materiales con láser. Los miembros del grupo desarrollan técnicas teóricas y experimentales que permiten diseñar y construir dispositivos optimizados para aplicaciones concretas.
Durante los últimos años se ha pasado (en colaboración con la Universidad de Valencia) a la fabricación y uso de fibras de cristal fotónico para construir los láseres. En estas fibras el confinamiento y propagación de la luz se consigue mediante micro-estructuras de agujeros de aire que se extienden a lo largo de la fibra. Esto ha permitido que en la Universidad de Zaragoza se construyan los primeros láseres con fibra de cristal fotónico dopada con erbio de fabricación española, superándose en algunos casos las máximas potencias que se habían conseguido hasta el momento.
Por otra parte, en los últimos años se ha pasado (en colaboración con el Instituto de Óptica del CSIC en Madrid) a la fabricación y estudio de guías integradas amplificadoras obtenidas irradiando vidrios mediante pulsos láser ultra-cortos. De esta manera se puede llegar a conseguir una integración en tres dimensiones, lo que permite una densidad muy superior de componentes integradas. Recientemente se han conseguido algunas guías con amplificación récord.