CULTURA, POLÍTICA SOCIAL Y DEPORTE
ACTIVIDADES CULTURALES
El Aula de Cine del Campus de Huesca recupera en enero las “joyas del cine mudo” del danés Benjamin Christensen
Siete películas de este actor y realizador, que trabajó en Europa y en Hollywood, conforman la programación que se ofrecerán en un nuevo ciclo, los lunes y los miércoles hasta el 1 de febrero
La bélica "Det Hemmelighedsfulde X", su debut en 1914, abre las sesiones que incluirán La brujería a través de los tiempos, su obra más conocida, o las producciones norteamericanas El circo del diablo o La isla misteriosa
El Aula de Cine del Campus de Huesca abre 2016 con un nuevo ciclo dedicado a recuperar 'joyas del cine mudo', que en esta ocasión se centra en las realizaciones del danés Benjamin Christensen. Siete películas de este actor y director, que trabajó en Europa y en Hollywood, conforman la programación que se ofrecerá, los lunes y los miércoles, desde el 11 de enero hasta el 1 de febrero. Todas las proyecciones tendrán lugar, a partir de las 19 horas, en el salón de actos de la Facultad de Empresa y Gestión Pública (plaza de la Constitución, 1).
Det Hemmelighedsfulde X, cinta bélica y de espionaje con la que debutó como director en 1914, abre las sesiones que, en las jornadas siguientes, incluirán Haevnens Hat (1916), una historia de suspense ambientada en el circo, La brujería a través de los tiempos (1922), su obra más conocida;o las producciones norteamericanas, realizadas entre 1926 y 1929, El circo del diablo, La novela de un mujik, Seven Footprints to Satan o La isla misteriosa.
Benjamin Christensen (1879-1959), realizador poco conocido pese al valor de su obra, estudió medicina en Dinamarca, su país natal, antes de formarse en arte dramático a comienzos del siglo XX. Tras una etapa como actor de teatro y comercial de una marca de champán, vuelve a actuar en la década de los años diez vinculándose a la joven industria cinematográfica danesa. Enseguida pasó a la dirección, reservándose algún papel como intérprete en sus primeros trabajos. Después de su tercera y más famosa película, la imprescindible La brujería a través de los tiempos (Häxan, 1922), ya solo actuó una vez en Michael (Carl Theodor Dreyer, 1924). Tentado por Hollywood, como muchos otros artistas europeos, llegó a realizar allí en la segunda mitad de los años veinte, seis obras, más una séptima que no completó él. Tardaría diez años en volver a dirigir, de nuevo en Dinamarca donde hizo las cuatro películas que cierran su filmografía, ya dentro del cine sonoro.
Más información:
Compartir: