INVESTIGACIÓN Y TRANSFERENCIA
Un investigador aragonés coordina un proyecto europeo para formar a jóvenes investigadores en materiales para robótica blanda
El programa está financiado por la Comisión Europea con 3,5 millones de euros y tiene una duración de cuatro años
El investigador aragonés Carlos Sánchez Somolinos, del Instituto de Nanociencia y Materiales de Aragón (INMA) -centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas y la Universidad de Zaragoza- y miembro del CIBER-BBN, coordina el proyecto europeo STORM-BOTS, que tiene como objetivo la formación de 13 jóvenes investigadores (tres de ellos en Aragón) en el área de los materiales para robótica blanda. El programa, financiado por la Comisión Europea con 3,5 millones de euros a través de la convocatoria de Acciones Marie Sklodowska-Curie, comenzó el 1 de enero de 2021 con la selección del equipo de científicos y tiene una duración de cuatro años, con la participación de 17 universidades, institutos de investigación, empresas del campo de la robótica y otras instituciones de Alemania, Países Bajos, Italia, Reino Unido, Suiza, Finlandia y España.
Abarcando aspectos de la química, la física, la ciencia de los materiales, la fabricación avanzada y la robótica, la red STORM-BOTS proporcionará a 13 jóvenes investigadores formación científica y tecnológica para impulsar la investigación en robótica blanda basada en elastómeros cristal líquido en Europa. STORM-BOTS, que recibió 160 solicitudes de investigadores noveles para formar parte del proyecto, cuenta además con líderes académicos y de importantes instituciones de investigación y con experiencia científica y técnica únicas, con el fin de proporcionar a la próxima generación de científicos e ingenieros el mejor entorno de investigación posible para desarrollar nuevos materiales y herramientas de fabricación para permitir funciones robóticas blandas. Se trata, en definitiva, de un programa de formación transnacional, integral, altamente integrado, multidisciplinario y multisectorial. A través de las actividades de la red, los estudiantes aprenderán las diferentes facetas de esta área de investigación de vanguardia, así como una variedad de habilidades transversales relevantes y necesarias para sus futuras carreras. En líneas generales, trabajarán en generar actuadores blandos que potencialmente permitan realizar funciones robóticas con aplicaciones en cirugía mínimamente invasiva o en háptica (ciencia del tacto), entre otras disciplinas.
La incorporación de materiales inteligentes, que responden con un cambio importante de una de sus propiedades físicas en respuesta a un estímulo externo (como el calor, la luz o un campo eléctrico o magnético) constituye una oportunidad para desarrollar nuevos elementos y dispositivos robóticos blandos disruptivos y puede abrir nuevas posibilidades en términos de diseños, funciones y respuestas, inaccesibles para los robots duros convencionales. “Estos constan de estructuras rígidas articuladas hechas con materiales duros, generalmente metálicos, que se mueven de manera controlada para llevar a cabo diferentes tipos de tareas. Pueden manipular objetos rígidos y pesados con un alto grado de precisión, pero suelen fallar al interactuar con objetos delicados o deformables, como tejidos y órganos vivos, ya que el control se vuelve extremadamente difícil, y este es uno de los grandes desafíos actuales de la robótica”, explica Sánchez. “Los materiales inteligentes pueden integrar la capacidad de detección, así como de deformación grande y controlada en respuesta a varios estímulos que pueden aplicarse de forma remota sin contacto físico. La detección y la activación se pueden acoplar en estos sistemas robóticos blandos dotándolos de cierto grado de autonomía, el material es la máquina”, añade el investigador, que prevé que los desarrollos en esta área puedan “revolucionar los campos de la cirugía mínimamente invasiva, la manipulación de materiales, la piel electrónica y las interfaces persona-máquina”.
En este escenario, Sánchez destaca que los elastómeros cristal líquido están recibiendo una atención cada vez mayor, ya que exhiben grandes deformaciones mecánicas programables en respuesta a diferentes estímulos. “Europa ha desempeñado un papel de liderazgo en la ciencia de los cristales líquidos desde su nacimiento. Para estar a la vanguardia también en el futuro, el objetivo de la red STORM-BOTS es aprovechar todo el potencial de estos materiales cristal líquido en la implementación de sistemas de recepción de señales, actuadores blandos y máquinas inteligentes”, señala.
Sobre las Acciones Marie Sklodowska-Curie
Las Acciones Marie Sklodowska-Curie del programa Marco de Investigación e Innovación de la Unión Europea Horizonte 2020 buscan garantizar el desarrollo óptimo y el uso dinámico del capital intelectual de Europa, con el fin de generar nuevas capacidades e innovación y, de este modo, realizar plenamente su potencial en todos los sectores y regiones.
Dentro de estas acciones Marie Sklodowska-Curie, las Innovative Training Networks (ITN) tienen como objetivo formar, por medio de una red internacional de centros públicos y privados, una nueva generación de investigadores creativos e innovadores, capaces de transformar los conocimientos y las ideas en productos y servicios para beneficio económico y social de la Unión Europea. Esta modalidad permite la contratación de jóvenes investigadores (Early Stage Researchers - ESR: investigadores que no hayan obtenido el título de doctor y estén en sus primeros 4 años de investigación).
Dentro de las ITN, las European Training Networks (ETN) como es el caso de STORM-BOTS, son redes de al menos 3 centros establecidos en 3 países diferentes de la UE27 o países asociados. En ellas es posible la contratación de un máximo de 15 investigadores pre-doctorales (ESR). En las ETN es obligada la participación de empresas en el consorcio, sobre todo pymes, para asegurar una exposición de los investigadores al sector industrial y, por tanto, una formación lo más amplia posible que les facilite desarrollar su futura carrera profesional tanto en ámbitos académicos como no académicos.
Las acciones ITN son convocadas anualmente con una participación muy elevada y unas ratios de éxito muy exigentes. Así, la convocatoria ETN 2020 en la que ha sido concedido STORM-BOTS -con el acuerdo de subvención nº 956150-, que estaba dotada de 445 millones de euros, recibió 1.280 solicitudes, de las cuales solo se han concedido 114, es decir, un 9%.