INVESTIGACIÓN Y TRANSFERENCIA
INVESTIGACIÓN
Almacenamiento inteligente de energía térmica para descarbonizar el sector energético
El grupo de investigación GITSE del I3A inicia un nuevo proyecto de transición ecológica y digital
Ahorrar energía, reducir emisiones, aprovechar recursos y evaluar el impacto ambiental son algunos de los objetivos del proyecto que arranca hoy en Zaragoza
Junto a la Universidad del País Vasco y el CIEMAT trabajarán para avanzar en la descarbonización y contribuir al despliegue de sistemas de almacenamiento de energía térmica
Ahorrar energía, reducir emisiones, aprovechar recursos y evaluar el impacto ambiental son algunos de los objetivos del proyecto que arranca hoy en Zaragoza
Junto a la Universidad del País Vasco y el CIEMAT trabajarán para avanzar en la descarbonización y contribuir al despliegue de sistemas de almacenamiento de energía térmica
El Grupo de Ingeniería Térmica y Sistemas Energéticos del I3A, en la Universidad de Zaragoza, gestionará un nuevo proyecto de Transición Ecológica y Digital (TED). Una línea de trabajo para avanzar en la descarbonización del sector energético mediante el almacenamiento inteligente de energía térmica (STES4D), que se desarrolla en tres subproyectos de la Universidad del País Vasco, el centro de investigación CIEMAT y la Universidad de Zaragoza.
La reunión de lanzamiento del proyecto tendrá lugar hoy y mañana en el edificio Betancourt del Campus Río Ebro. Será un encuentro híbrido que contará con la participación de investigadores de Bilbao y Madrid, y también del grupo de trabajo europeo de manera telemática, que comenzará hoy a las 15 horas y mañana martes a las 9.
El objetivo del proyecto es contribuir al despliegue de sistemas de almacenamiento de energía térmica (TES) que sean capaces de gestionar el calor y el frío para ahorrar energía. “Si podemos almacenar directamente, por ejemplo, el calor del sol para utilizarlo también en forma de calor no hace falta transformar en electricidad, sino que lo almacenas y lo usas, logrando una mayor eficiencia con menor coste”, explica Ana Lázaro, investigadora del Grupo de Ingeniería Térmica y Sistemas Energéticos (GITSE) del I3A y coordinadora del proyecto.
Con el proyecto STES4D, que tendrá una duración de dos años, pretenden reducir las emisiones de CO2 y el consumo de recursos fósiles, aumentando la integración de fuentes renovables en la producción y gestión de la energía. “El objetivo es aprovechar recursos como la energía solar o el calor residual de las industrias para así, por ejemplo, evitar usar la caldera y tener que quemar gas natural”. Un modelo que, asegura Ana Lázaro, ya está implantado en Dinamarca donde utilizan sistemas de almacenamiento estacional, “emplean el calor proveniente del sol del verano para proporcionar la calefacción en invierno”.
Uno de los puntos fuertes en el que trabajarán los investigadores del I3A será evaluar el impacto ambiental de este almacenamiento de energía térmica. Analizarán el ciclo de vida de los sistemas para detectar cuál es su efecto en el medio ambiente.
El grupo de investigación GITSE ya trabaja en la poligeneración, es decir utilizar un mismo recurso, para producir varias demandas como puede ser el calor, el frío, electricidad o el agua, y reducir así las emisiones de CO2 para ser más eficientes.
En colaboraciones previas con la Agencia Internacional de la Energía, detectaron una serie de “puntos críticos” que impedían un desarrollo pleno de los sistemas de almacenamiento térmico, por lo que aprovecharon la convocatoria del proyecto TED para investigar y mitigarlos. Entre estos puntos, se encuentra la parte de materiales, liderada por el CIEMAT, el sistema de almacenamiento de energía térmica, a cargo de la Universidad del País Vasco, y la integración del almacenamiento en el sistema energético coordinado por el grupo GITSE del I3A. “Nosotros nos encargamos de la integración, es decir, cómo usas ese almacenamiento en una aplicación concreta, cómo podría ser una red de calefacción”, relata Ana Lázaro.
Además, cuentan con la participación de grupos de investigación de Suiza, Dinamarca y Brasil, todos ellos, a excepción de Brasil, pertenecen a la Agencia Internacional de la Energía.